Por ejemplo: Romeo y Julieta, Juventud en Éxtasis,...
Estás en: Página Principal > Resúmenes > Libros > Diarios. Virginia Woolf

Resumen del libro Diarios. Virginia Woolf
Enviado por Eleazar Sulbaran
Publicado el 2015-04-10 04:08:57
1188 palabras
Escritos con honestidad, agudeza y sentido de la inmediatez, los diarios de Virginia Woolf hacen aflorar esa corriente de vida que fluye incontenible detrás de sus novelas.

«Yo utilizo a mis amigos más bien como lámparas: veo que ahí hay otro campo: con tu luz. Allí, una colina. Ensancho mi paisaje», nos dice, y sus palabras nombran también y dan sentido a la lectura de estas páginas.

La luz de la escritora se vierte sobre los espacios, su ingenio y clarividencia iluminan ya un suceso menor en el curso de la noche; alguien robó su bolso; ya los grandes hitos de su obra literaria. «Digo que estoy escribiendo Las olas siguiendo un ritmo, no una trama», leemos, o bien: «Orlando es un libro muy rápido y brillante, sí, pero no intenté explorar».

Este volumen abarca íntegramente el período de tiempo comprendido entre 1925 y 1930. Virginia Woolf alcanzó entonces su plena madurez como escritora, consiguió una posición segura y respetada en el mundo de las letras y participó de una agitada vida social. Pese a todo, día a día siguió consignando la impresión que le causaban escritores como W. B. Yeats, H. G. Wells o Thomas Hardy, su amor por Vita Sackville-West y el de Ethel Smith por ella, sus lecturas, sus empeños, las franjas más inaprensibles de su intimidad.

Este volumen es paralelo a la revisión de los ensayos de El lector común, de la novela La señora Dalloway, de la redacción de Al faro, Orlando, Las olas y del ensayo Una habitación propia, es decir, del centro de su obra.

Ciertamente, hoy día, cuando hablamos de la obra de Virginia Woolf ya no podemos prescindir de su impar y desigual diario y de sus numerosas cartas, de las cuales se han publicado seis volúmenes, y de las que hay en español, hasta donde sé, una antología, pero sólo de las enviadas a sus amigas.

Es algo que se ha puesto de moda: las críticas que sólo escriben sobre libros de mujeres y su corolario, poesía y pensamiento femeninos, etcétera; un error consistente en bajar la cabeza (perdiéndose parte de su masa encefálica) hasta el sexo. Imaginen, sin más comentarios, a un crítico masculino que sólo lo hiciera de libros publicados por hombres o una antología de la correspondencia de André Gide, por ejemplo, sólo a sus amigos. Algo distinto es si colectamos una correspondencia amorosa, pero también en esto la vida suele ser diversa.

Volviendo a lo que importa: ¿Quién fue Virginia Woolf? Al fin y al cabo, hablamos de un diario, y de uno muy peculiar, capaz no sólo de hacer un retrato de un solo trazo de la música y escritora (y algo energúmena) Dame Ethel Smyth o de W. B. Yeats, sino de valorar las obras de sus contemporáneos con una inteligencia asombrosa, cualidad nada común. No obstante, también se equivocó en algunos casos, llevada por sus prejuicios o por las obsesiones derivadas de su búsqueda.

Woolf se nos presenta en este, y en el resto de su dilatado testimonio, como una mujer que ha asumido tempranamente la muerte (su madre muere cuando ella tiene trece años), amante de la soledad y al mismo tiempo mundana, sensual y asexuada, y, por encima de todo, sabedora de que tiene un destino que cumplir, nada claro, ciertamente: el de realizar una obra literaria que no siempre adopta, en su horizonte, el perfil de la novela.

De hecho, muchas de sus obras son la exploración de sentimientos más que la creación de personajes y tramas, aunque siempre buscó y a veces logró el gran enigma de la forma. Las digresiones de Henry James, de las que a veces se burlaba, son en la Woolf tanteos, de una gran perfección expresiva, en un mundo inexplorado.

En este sentido puede decirse que fue una aventurera que no se detuvo en sus logros sino que buscó siempre algo más. Los caminos marcados no fueron sus caminos porque ella siempre salía al encuentro, no de lo que sabía sino de aquello que, de manera imprecisa, quería saber. Su vanidad estaba, sobre todo, en su arrojo, en creer que lo podía hacer mejor.

Sin duda, el personaje que dibujan estas páginas es el de una poeta lúcida, observadora, extremadamente sensible, egotista, cordial, mundana y solitaria, guardiana de una pequeña aristocracia intelectual y espíritu crítico ante las convenciones de su tiempo, que fue tanto el victoriano de su niñez como el eduardiano de su desarrollo intelectual. Como muchos otros artistas ingleses, tiene una percepción de la naturaleza nada reductora (como sí lo es la española, por ejemplo), lo que supone, por el grado de su sensibilidad, una dimensión espiritual sólo semejante a la que ha dado el arte oriental.

Aunque no hay ninguna teoría de la novela en estas páginas, sí encontramos numerosos apuntes sobre el género y sus entresijos. Pensaba que tenía que buscar para sus libros de ficción un nombre más adecuado que novela, tal vez "elegía". Una escritura sobre lo perdido.

Es curioso que a pesar de que tomaba apuntes de conversaciones y de caracteres, no dudara en afirmar que "el suceso real prácticamente no existe" y, por lo tanto, podemos deducir, no hay literatura realista sino realismos. Woolf buscaba la economía verbal en el sentido de que sabía que la literatura se hace con las palabras exactas (esas que no se sabe con exactitud cuáles son porque cada obra verdadera señala las suyas), de ahí que denostara tanto libro famoso en el que el enfoque era falso y la escritura coloreada.

El canon de la autora de Las olas era bien exigente, y no se dejaba engañar con cualquier cosa. Sabía bien que Eliot era un gran poeta, tanto como Yeats, pero no ignoraba —por poner un ejemplo de otro género— los límites de Lytton Strachey como biógrafo. Esto no significa que no gustara y valorara obras medianas, todo... [continua]

Leer Texto Completo



¿Te sirvió este documento?
 (50%) SI    NO (50%)




Compartir este resumen:

O bien, copie y pegue el siguiente código en su sitio web, blog o foro:


Comentarios
Para dejar un comentario, regístrese gratis o si ya está registrado, inicie sesión.

Todavía no se ha escrito ningún comentario.


Resúmenes relacionados
Resumen por Capítulos de "Por qué tiene que ser todo tan difícil" de Nando López Capítulo 1 El libro inicia presentando al grupo de ...
Resumen Extenso de "Carta de una Desconocida" de Stefan Zweig "Carta de una desconocida" es una novela corta y profundamente emotiva ...
Resumen de "Nunca seré tu héroe" de María Menéndez-Ponte Capítulo 1 Andrés, el protagonista, se siente constantemente presionado por...
Sé que mis padres hubieran preferido no ir al velatorio del Tordo. Mamá, sobre todo, parecía buscar en un repertorio de comportamientos ad...
Nombre del Libro : Ámbar en cuarto y sin su amigo Autor : Paula Danzinger Editorial : Alfaguara infantil Capitulo UNO Ámbar mi...
© 2024 Resumenes10.com - Recopilatorio de resúmenes, tareas, apuntes y trabajos de todo tipo gratis   Aviso Legal | Contacto | Pendientes

eXTReMe Tracker